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Dos pilotos indios dejan a dos aeromozos a los mandos del aparato para dormir
Dos pilotos de las aerolíneas indias Air India pusieron al mando de un avión a los auxiliares de vuelo (los aeromozos) mientras ellos se echaban una siesta, poniendo en riesgo la vida de 166 pasajeros.
Los dirigentes de Air India han suspendido de empleo y sueldo a cuatro miembros de la tripulación (el capitán del avión, su asistente, un azafato y una azafata) del vuelo de Bangkok a Delhi realizado el 12 de abril.
Media hora después del despegue, cuando el avión alcanzó su altura de crucero, el asistente del capitán, Ravindra Nath, salió de la cabina y llamó a un aeromozo, Steward Jay Bhatt, para que le reemplazara.
“En virtud de las normas, si uno de dos pilotos sale de la cabina, debe asegurarse de que el otro miembro de la tripulación se queda en su lugar para poder llamarlo en casos de emergencia”, explicó el representante de Air India. Algo que, de hecho, sí hizo Jay Bhatt.
Sin embargo, el capitán de la aeronave, B.K. Soni, decidió seguir el ejemplo de su colega y unos minutos más tarde se dirigió a la zona de pasajeros, poniendo en su lugar a una azafata, Canica Kala.
De acuerdo con el mayor de los auxiliares de vuelo, que estaba observando la situación, Soni activó un piloto automático y explicó brevemente a sus "sustitutos" cómo manejar el equipo.
Los agotados pilotos se arrellanaron en los asientos de la clase business, donde lograron dormir unos 40 minutos antes de que la azafata apagara involuntariamente el botón del piloto automático, poniendo en riesgo la vida de 166 pasajeros.
Después de lo sucedido los pilotos Soni y Bhatt regresaron a sus puestos de trabajo de inmediato, donde pasaron el resto del vuelo. La Dirección de las aerolíneas fue informada del incidente inmediatamente después de que la aeronave llegara al aeropuerto de Delhi.
Media hora después del despegue, cuando el avión alcanzó su altura de crucero, el asistente del capitán, Ravindra Nath, salió de la cabina y llamó a un aeromozo, Steward Jay Bhatt, para que le reemplazara.
“En virtud de las normas, si uno de dos pilotos sale de la cabina, debe asegurarse de que el otro miembro de la tripulación se queda en su lugar para poder llamarlo en casos de emergencia”, explicó el representante de Air India. Algo que, de hecho, sí hizo Jay Bhatt.
Sin embargo, el capitán de la aeronave, B.K. Soni, decidió seguir el ejemplo de su colega y unos minutos más tarde se dirigió a la zona de pasajeros, poniendo en su lugar a una azafata, Canica Kala.
De acuerdo con el mayor de los auxiliares de vuelo, que estaba observando la situación, Soni activó un piloto automático y explicó brevemente a sus "sustitutos" cómo manejar el equipo.
Los agotados pilotos se arrellanaron en los asientos de la clase business, donde lograron dormir unos 40 minutos antes de que la azafata apagara involuntariamente el botón del piloto automático, poniendo en riesgo la vida de 166 pasajeros.
Después de lo sucedido los pilotos Soni y Bhatt regresaron a sus puestos de trabajo de inmediato, donde pasaron el resto del vuelo. La Dirección de las aerolíneas fue informada del incidente inmediatamente después de que la aeronave llegara al aeropuerto de Delhi.
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