Según el canciller ruso, Serguéi Lavrov, Rusia y EE.UU. han acordado utilizar todas las oportunidades que tengan para hacer sentarse a la mesa de negociaciones al Gobierno sirio y a la oposición, y se ha acordado celebrar antes de finales de mayo una conferencia en Ginebra sobre Siria que sería una continuación de la conferencia del año pasado. A esta jornada serán invitadas ambas partes del conflicto, aseguró el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry.
En el caso de que Siria se niegue a una solución política, "le esperan consecuencias negativas, incluso hasta el colapso", aseguró Kerry. Además dijo que no imagina "cómo el presidente sirio, Bashar al Assad, puede mantenerse en el poder", pero, según él, este asunto no debe resolverse ahora.
En cuanto al supuesto uso de armas químicas en Siria, el diplomático ruso sostuvo que Rusia no está menos preocupada que EE.UU. en este sentido, pero indicó que este tema es muy complicado. "Tenemos que estar cien por ciento seguros de que no estamos envueltos en rumores y provocaciones", señaló Lavrov.
Moscú y Washington coinciden en la necesidad de mantener la estabilidad y luchar contra el extremismo en Siria, indicó el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, en una reunión con el presidente ruso Vladímir Putin.
El jefe de la diplomacia estadounidense agradeció a Rusia su cooperación en la investigación del atentado terrorista en Boston y destacó que el presidente Obama está ansioso de discutir con Putin los problemas más importantes de la agenda internacional, tales como Corea del Norte, Irán y Siria en el marco de la cumbre del G8. Vladímir Putin anunció que prepara una respuesta a una carta que le remitió Barack Obama y dijo que confía en reunirse pronto con él personalmente.
La visita de Kerry a Moscú se produce cuando las relaciones ruso-estadounidenses atraviesan un momento complicado. El pasado mes de abril EE.UU. publicó la 'Lista Magnitski' que incluye a 18 personas que, según Washington, están involucradas en violaciones de los derechos humanos y, en concreto, en la muerte de Serguéi Magnitski, asesor del fondo de inversión británico Hermitage Capital, que murió en prisión en noviembre del 2009 a la espera de ser juzgado por evasión fiscal a gran escala.
En un gesto recíproco, Rusia publicó la llamada 'lista Guantánamo', una relación de ciudadanos estadounidenses a quienes prohíbe la entrada al país por haber cometido violaciones de los derechos humanos.