El joven dirigente norcoreano realizaba una inspección en la unidad 291 de la Marina y, tras observar que algunos buques se encontraban en lugares expuestos, exigió a las tropas que los camuflaran, según detalló KCNA, que no precisó la fecha de la visita de Kim.
Según la agencia, Kim Jong-un comentó a los soldados que "los enemigos" de Corea del Norte tratan de rastrear constantemente los movimientos de la técnica militar norcoreanos y que por ello es importante que estén bien ocultos.
Las declaraciones del líder aluden a las continuas actividades de vigilancia que sobre el Ejército de Corea del Norte hacen Seúl y Washington, principalmente mediante imágenes por satélite, para intentar detectar los movimientos de tropas y de equipos de combate del régimen comunista.