"Por las características físicas que da [el doctor Sergio Drapper], sería Michael Townley quien hizo la maldad contra Neruda, y otros dos más que ya están identificados [el general Carlos Prats y el ex canciller Orlando Letelier] en la investigación que lleva el juez Mario Carroza", dijo Manuel Araya, ayudante personal de Neruda y querellante en el juicio.
Según la investigación, tras el golpe de Estado del general Augusto Pinochet, que supuso el inicio de la dictadura en Chile (1973-1990), Townley, contrario a Salvador Allende (que gobernó de 1970 a 1973), pasó a formar parte de los servicios de inteligencia y en su casa hacía experimentos con el gas sarín y otras sustancias químicas que se emplearon contra los opositores a la dictadura.
Araya aseguró que están "en el camino correcto", ya que han aparecido "más cosas raras" sobre ese 23 de septiembre en que murió Neruda, y dijo que en las próximas semanas se conocerán los nombres de otros dos médicos vinculados al asesinato del poeta.
El 19 de septiembre de 1973, ocho días después del golpe de Estado que derrocó al presidente Salvador Allende, Neruda, que padecía cáncer de próstata, fue internado de urgencia a una clínica privada en estado grave, donde falleció cuatro días después.
La causa oficial de su muerte fue el cáncer de próstata, pero Araya destacó que su estado no era grave: "Pesaba cerca de 100 kilos. Recibía y visitaba a sus amigos intelectuales y políticos. Nunca dejó de escribir. Eso no hubiese sido posible estando grave". A su juicio, el poeta fue envenenado mediante una inyección letal, por lo que solicitó junto a algunos familiares del poeta una investigación judicial que sigue en curso y que conllevó la exhumación de los restos el pasado 8 de abril.