"La gente que está luchando contra el Ejército sirio está muy bien armada. En el asedio de Al Qusair ambas partes usaron armamento pesado. La oposición recurrió a la artillería y a sistemas de defensa antiaérea", precisó el ministro en una entrevista concedida a la cadena de televisión estadounidense CBS.
El Gobierno de Bashar al Assad recuperó totalmente el control de esta estratégica ciudad, situada en el oeste del país y cerca de la frontera con el Líbano, el pasado 5 de junio. Cerca de 3.000 rebeldes se enfrentaron a las fuerzas leales a Damasco en una ofensiva que duró tres semanas.
Según el periodista ruso Serguéi Filátov, "siguiendo el ejemplo de Libia, aquellos que buscaban derrocar a Al Assad querían crear un tipo de Bengasi sirio, y poco a poco Al Qusair se estaba convirtiendo en una base de milicianos".