El hombre, Ron Fox, la condujo a una sala para revisiones donde sin testigos empezó a manosearla, supuestamente, para buscar drogas. Según la víctima, le tocó las nalgas y el pecho y le ordenó que se levantara la camisa.
Visiblemente afectada, la mujer salió corriendo donde estaba la jueza pidiéndole ayuda para que sustituyera a Fox por una mujer. La magistrada, Patricia Donninger, ignoró a la víctima: en el video se aprecia cómo le da la espalda, actuando como si no la oyera.
Mientras tanto Fox paró con el registro y ordenó que detuvieran a la mujer. En ese instante Contreras desconsolada y sorprendida comienzó a gritar: "¿Por qué, señor? ¿Por qué debería ser detenida? ¿Puede por favor decirme?", mientras le ponían las esposas delante de su pequeña hija.
El ejecutor judicial le dijo a Contreras que la única manera de evitar la detención era retractarse de las "falsas acusaciones hechas en contra de un oficial de la ley". Lo único que tuvo tiempo de hacer fue besar a su hija de dos años y decirle adiós. Según la cadena Klas TV, la niña tuvo que vivir dos meses en un centro de menores.
Cuando Contreras salió de la prisión interpuso una denuncia. De momento ya ha conseguido que Fox fuera despedido tras seis meses de investigaciones, a pesar de que el ex alguacil no ha reconocido su culpa. Además, ha logrado que abran una investigación contra Donninger y otros funcionarios.