Entre los días 4–7 de este mes estará de visita en Rusia el ministro colombiano de Exteriores, Jaime Bermúdez, con el objetivo de impulsar las relaciones económico-comerciales entre ambos países.
Según las anteriores declaraciones del portavoz de la cancillería rusa Andrei Nesterenko, la visita busca impulsar los esfuerzos de ambas partes hasta plasmarlos en programas concretos y proyectos espaciales, energéticos, petroleros, agricultores y tecno-militares.
Se informa que Bermúdez comenzará la ronda de reuniones con un encuentro con el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Rusia, el ex primer ministro Yevgueni Primakov.
Asimismo, está prevista una reunión con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, que visitó Colombia en noviembre de 2008 en una gira por Latinoamérica.
También comentó que Rusia está dispuesta “a suscribir con Colombia un acuerdo de asistencia jurídica mutua en casos penales”.
Los analistas políticos no descartan que durante la visita el canciller aborde asuntos de cooperación bilateral entre organismos de seguridad y algunos problemas que tienen ambos países en este contexto.
Uno de estos problemas ha sido la noticia que llegó pocos días antes de la visita de Bermúdez, de que el ex coronel israelí Yair Klein, condenado en ausencia por terrorismo en el país sudamericano y arrestado en Rusia en 2007 por orden de Interpol, consiguió que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos calificara de ilegal la decisión de la Justicia rusa de extraditarlo a Colombia.
Esa decisión fue calificada de “burla” por el vicepresidente colombiano, que recordó los crímenes cometidos por el mercenario israelí que entrenaba a los insurgentes de las FARC.
Por su parte, los abogados de Klein se remiten a las palabras del vicepresidente colombiano, Francisco Santos, quien calificó de “vergonzosa” la condena a diez años que pesa contra Klein y dijo que “habrá que buscar la manera para que este señor se pudra en la cárcel por haber participado en la conformación de grupos paramilitares”. De este modo, afirman los abogados, la vida del acusado en Colombia correrá peligro.
Colombia también exige la extradición de Tailandia a Estados Unidos del empresario ruso Víctor But, apodado el “Mercader de la Muerte” y acusado por Bogotá de intentar vender armas a las FARC. Moscú se opone a la extradición.