Los líderes del G8 podrían firmar una declaración sobre Siria

Serguéi Ryabkov, viceministro de Exteriores de Rusia, ha señalado que los líderes del G8 podrían firmar un acuerdo sobre el conflicto en Siria, a pesar de que se mantienen algunos desacuerdos.
Ryabkov aseguró además que en el documento sobre Siria no se habla sobre el destino de Bashar al Assad. "Eso sería no sólo inaceptable para Rusia, sino que también sería incorrecto y violaría el equilibrio político forjado con tanto esfuerzo".   

Según el viceministro, el objetivo principal del proceso político es lograr que las partes se sienten a la mesa de negociaciones y permitirles determinar por sí mismos el curso de su desarrollo. "De lo contrario, no tiene sentido comenzar el proceso", agregó.  

Ryabkov sugirió además que EE.UU. y la UE podrían hacer más para trabajar con las fuerzas de la oposición en Siria.

"Solo puedo decir que en lo relación con el trabajo con las fuerzas de la oposición nuestros socios en el Grupo de los Ocho podrían hacer mucho más, esto se aplica a EE.UU y la Unión Europea", afirmó el diplomático, agregando que "no hay otro camino".  

En un primer momento la agencia Reuters, citando una fuente no identificada, informó de que los líderes del G8 que mantienen conversaciones en Irlanda del Norte no habían llegado a un consenso sobre el futuro Gobierno de transición en Siria. El interlocutor de la agencia dijo que la posición de Rusia sobre Siria no coincide con las opiniones de los otros miembros del Grupo de los Ocho.

Entre tanto, los mandatarios de las ocho naciones más industrializadas del planeta lograron un acuerdo este martes para acabar con el pago de rescates en los secuestros que sirven para financiar el terrorismo internacional, según anunció un portavoz del primer ministro británico, David Cameron. 

Downing Street indicó en Twitter que los presidentes y primeros ministros de Rusia, EE.UU., Japón, Reino Unido, Alemania, Italia, Canadá, y Francia apoyaron esa iniciativa británica en su segunda y última jornada de su cumbre de Lough Erne (Irlanda del Norte). 

Por otra parte, Marinela Correggia, miembro de la red No a la Guerra, opina que los países occidentales deben oír la postura de Rusia sobre Siria e insistir en que los rebeldes participen en las negociaciones en Ginebra, en vez de intentar limpiarles las manos a los Gobiernos serviles.

Si EE.UU. de verdad quisiera proteger a los civiles, que son víctimas de la guerra, tendrían que presionar a sus aliados locales  


“Si EE.UU. de verdad quisiera proteger a los civiles, que son víctimas de la guerra, tendrían que presionar a sus aliados locales, los llamados rebeldes para que finalmente entreguen las armas y acepten discutir en Ginebra, pero ellos no lo hacen”, asegura Correggia. 

Según la activista, los países de Occidente deberían “escuchar a Rusia, que tiene una postura muy clara sobre siria desde el inicio de la Guerra”. 

“Occidente necesita Gobiernos muy serviles como los petromonarcas y como muchos Gobiernos ahora en Oriente Medio que aún se llaman islámicos. Es un Islam amigo de occidente, un islam capitalista y filoocidental”, agregó la activista.