El analista político y experto en América Latina David Palacio no cree que las promesas de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, vayan a cambiar considerablemente la situación en el país. "Esta pues es una medida realmente populista porque el Gobierno sabe que a cambio de realizar esta medida van a tener que suprimir y cortar otros beneficios sociales de los que realmente deberían estar interesados en la sociedad", afirma el experto.
Se está dando una especie de alegría momentánea a los manifestantes
Según Palacio, el Gobierno "está buscando un equilibrio y está dando como una especie de alegría momentánea a los manifestantes".
"La perspectiva real ahora mismo es que estas manifestaciones están encontrando su foco mediático en la Copa Confederaciones, por lo tanto yo dudo muchísimo de que pueda llegar a extenderse de una forma masiva el fenómeno de Brasil".
David Palacio considera que al terminarse la Copa Confederaciones las manifestaciones van a bajar considerablemente, esperando a que venga nuevamente ese foco mediático "que será o bien la visita del papa a Brasil o bien los Juegos Olímpicos".