Según los documentos filtrados sobre la NSA, el entonces presidente de EE.UU., George W. Bush, autorizó después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 un programa de vigilancia secreto que facilitó al Gobierno de EE.UU. información sobre correos electrónicos y metadatos de Internet y que continuó bajo la presidencia de Barack Obama durante el año 2011.
La información filtrada por 'The Guardian' llega tres semanas después de que el rotativo británico publicara una filtración de documentos clasificados de la NSA atribuida a Edward Snowden, un exanalista de la CIA buscado por espionaje en EE.UU.
En el primer artículo publicado sobre las filtraciones de Snowden, el periodista Glenn Greenwald detalló cómo metadatos telefónicos, es decir, información sobre los hábitos telefónicos de millones de estadounidenses, estaban siendo suministrados regularmente a Washington bajo las órdenes secretas del Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera.
De acuerdo con un comunicado suministrado a 'The Guardian' por el director de comunicaciones de la Inteligencia Nacional de EE.UU., el programa de recolección de metadatos de Internet se interrumpió en 2011 y al parecer no ha sido reiniciado.
Sin embargo, en diciembre de 2012 se puso en marcha otro programa que permite a la NSA analizar las comunicaciones que se realizan dentro de territorio estadounidense, lo que supone una duplicación de la cantidad de datos que pasan a través de sus filtros, afirmó el periódico.