Los presidentes de Rusia y EE. UU., Dmitri Medvédev y Barack Obama, respectivamente, firman hoy el nuevo START, un paso clave para garantizar la seguridad mundial. RT transmite la ceremonia.
"Un hecho significativo que va a determinar el desarme mundial a largo plazo". El presidente ruso ha calificado así al tratado START que se firmará en menos de 2 horas.
Dmitri Medvédev ya ha llegado a Praga para la rúbrica de este nuevo convenio de reducción de armas estratégicas. El acuerdo tiene como objetivo mantener el balance de fuerzas e intereses de Moscú y Washington. Rusia espera que el documento ingrese a la Duma estatal y al Congreso norteamericano para su ratificación, a finales de este mes. Mientras tanto, la Administración de Barack Obama ha presentado su doctrina nuclear.
En el texto se destaca que la amenaza principal para Estados Unidos, consiste en que las armas atómicas puedan acabar en las manos de terroristas. Además, Washington declaró que no usará este tipo de armamento contra estados que no posean tales o que se sumen al Tratado de no proliferación.
Según el presidente de la academia de Asuntos Geopolíticos, este tratado es más necesario para EE. UU., especialmente si se toma en cuenta su nueva doctrina nuclear.
"La táctica de las negociaciones en el proceso de preparación del nuevo tratado perseguía los intereses de ambas partes. La parte norteamericana, el presidente Barack Obama, fue el iniciador de este proceso. Este tratado es más necesario para Estados Unidos ya que está cambiando su estrategia militar y política y ahora ya no da tanta importancia a las armas estratégicas nucleares".
La parte rusa califica al nuevo START como absolutamente equitativo y cree que es digno de ser ratificado. El tratado es "el primer documento de este tipo que es absolutamente equitativo según su espíritu, así como su letra", subrayó el ministro ruso, recordando que su antecesor, el START 1, contenía muchos "puntos que discriminaban a Rusia". "Todos esos momentos se han excluido y está garantizada la paridad de Rusia y EE. UU." Lavrov también expresó la esperanza de que el documento sea presentado en la Duma y en el Congreso para su ratificación a finales de abril.
El nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas START debe reemplazar al START 1, que fue firmado por EE. UU. y la URSS en 1991 y expiró el 5 de diciembre de 2009. Originariamente, los países planearon preparar el documento sucesor antes de esa fecha límite, pero el proceso se retrasó debido a distintas diferencias entre ellos. En concreto, Moscú y Washington no pudieron llegar a un acuerdo por la intención norteamericana de desplegar su escudo antimisiles en Europa, los problemas del control del uso de los misiles balísticos intercontinentales y por el número admisible de portadores de cabezas nucleares de combate.