Cinco mil policías intentarán devolver la paz a Ciudad Juárez
En la urbe más violenta de México, el Gobierno del país intenta ofrecer una estrategia más amplia y participativa con la sociedad en la lucha contra el crimen y el narcotráfico.
En febrero las autoridades del país volvieron a la idea del 'Operativo Conjunto Chihuahua', lanzado en marzo de 2008, en el que la Policía Federal apoyaba al Ejército, cuyo protagonismo en los labores de la seguridad pública había sido criticado por varias organizaciones, ya que la violencia, los secuestros, las extorsiones, los robos y los asesinatos en estos dos años todavía se han incrementado.
Este año el Gobierno federal, optando por dar un nuevo giro a su estrategia, introduce los cambios en la actualmente llamada 'Operación Coordinada Chihuahua', incluida la sustitución de las tropas por las fuerzas policiales.
El coordinador de la Policía Federal, Facundo Rosas, informó citado por EFE, que a partir del 8 de abril la Policía Federal asume la responsabilidad de garantizar la seguridad pública en Ciudad Juárez. "Para la atención de la zona urbana de Ciudad Juárez se cuenta con 5.000 elementos de la Policía Federal, 412 carros de radio patrulla, 8 vehículos blindados, 90 motocicletas y 4 aeronaves", precisó el funcionario. La Policía se ocupará también de la vigilancia de escuelas y centros de rehabilitación de drogodependientes.
A su vez, el Ejército permanecerá con un "plan operativo para la seguridad en cruces internacionales y en terminales de transporte aéreo y terrestre". Los militares mantendrán "puestos de control durante las 24 horas del día para el ingreso y salida a Ciudad Juárez" y continúan con "el control de la zona rural y en las comunidades ubicadas en el Valle de Juárez", vecino a la ciudad.
El alcalde de la fronteriza Ciudad Juárez, José Reyes Ferriz, señaló que la medida implica "el retiro de todos los elementos del Ejército, que están trabajando en la Secretaría de Seguridad Pública municipal, incluyendo los mandos", unos 1.200 en total. Reyes Ferriz apuntó que para evitar posibles abusos de los agentes federales contra los juarenses, habrá estrictas medidas de control.
Ciudad Juárez, habitada por 1,5 millones de personas, es la urbe más violenta de México con más de 5.000 muertes atribuidas al crimen organizado desde 2008 (sólo en lo que va de este año han muerto 650 personas), por lo que fueron desplegados en ella unos 8.000 militares y cerca de 2.000 agentes federales.