Según Marcos Sales, un corredor español de 35 años, cada año el peligro aumenta debido a la gran cantidad de gente y a los corredores inexperimentados. En 2012, 20.700 corredores participaron en los ocho encierros de las fiestas, es decir, una media de 2.587 por día y cada año entre 200 y 300 resultan heridos, un 3% de gravedad.
La partida tuvo un retraso de 19 minutos debido a que unos supuestos separatistas vascos enmascarados colgaron sobre la fachada del ayuntamiento una gran bandera vasca, que finalmente fue quitada por la Policía. Un total de 15 personas han muerto a causa de los toros desde que se tiene registro, desde 1924.