"Hoy estoy aquí para ayudar a prevenir que Egipto se convierta en un producto propiedad de una persona y protestar contra la confiscación de la Constitución por un solo partido. No nos deshicimos de un régimen militar para reemplazarlo por una teocracia fascista", dijo el menor.
Hoy estoy aquí para ayudar a prevenir que Egipto se convierta en un producto propiedad de una persona y protestar contra la confiscación de la Constitución por un solo partido. No nos deshicimos de un régimen militar para reemplazarlo por una teocracia fascista
A la pregunta de la periodista sobre qué es una teocracia fascista, Ali no vaciló en explicar que se trata de la "manipulación de la religión para imponer normas extremistas en nombre de la religión, a pesar de que la religión no manda eso".
Ali relató que escucha mucho a la gente y usa su propio cerebro, además de leer periódicos, ver la televisión y buscar en Internet.
El muchacho concluyó que los objetivos de la revolución, tales como la libertad y la justicia social, no se han logrado. Acentuó el desempleo y represalias policiales.
El niño rechazó el proyecto de Constitución del país, entre otras cosas, en lo que se refiere a los derechos de las mujeres.
"Dicen que las mujeres son iguales a los hombres en todas las materias salvo en aquellas que contradicen a la ley islámica. Pero la ley islámica permite a los hombres 'disciplinar' a sus esposas. Esto no es disciplinar, esto es abuso y locura", exclamó.
Según él, todo este proceso político es nulo "debido a que el Parlamento no es válido tanto popular como constitucionalmente".
Aunque la entrevista fue subida en marzo pasado, el video ha pasado a ser muy popular en los últimos días debido al derrocamiento del Gobierno de Morsi. La grabación ha ganado más de 1,6 millones de visitas en YouTube.