Cuando la situación se volvió crítica y la niña estuvo a punto de quedarse ciega por el exceso de presión intracraneal, los médicos chinos optaron por una prótesis de cráneo impreso en 3D, informa la página web de 'El Diario del Pueblo'.
A raíz de los datos proporcionados por el escaneo tridimensional, los médicos imprimieron tres mallas de titanio. Después de la operación de retirada del líquido de la cabeza, que duró 17 horas, los huesos del cráneo fueron reemplazados por estos implantes. La cantidad de dinero necesaria para la operación (entre 64.000 y 80.000 dólares) fue recaudada por Internet.
Según un cirujano, los médicos prevén que la niña se recupere totalmente, y a medida que vaya creciendo, los elementos de titanio 'se irán cubriendo' de su propio tejido óseo.
Baby becomes first person in the world to have 3D printed SKULL //t.co/2vCj2moUtrpic.twitter.com/Rb81kajoCN— Daily Mail Online (@MailOnline) julio 16, 2015