Según el artículo publicado recientemente por investigadores de la Universidad de Michigan en la revista científica de la Sociedad Estadounidense de Química 'ACS Macro Letters', el nuevo material se compone de un líquido reactivo, que contiene trietilborano entre dos capas de polímero sólido. Cuando algo provoca una ruptura en el sólido, el trietilborano reacciona con el oxígeno atmosférico y crea un 'tapón' que sella el agujero en pocos segundos. Existen otros plásticos y polímeros de autosanación, pero repararse a sí mismos les cuesta mucho más tiempo.
Los investigadores afirman que el nuevo material podría servir para proteger las naves espaciales, ya que la reacción se produce incluso si la concentración de oxígeno es muy baja como en la órbita baja terrestre donde se encuentra la Estación Espacial Internacional. La industria automotriz también podría aprovechar este avance tecnológico para mejorar la seguridad de los vehículos que usamos cotidianamente.