Un nuevo estudio, liderado por Daniel Pincheira-Donoso, de la Escuela de Ciencias de la Vida de la Universidad de Lincoln, afirma que la teoría de la selección de fecundidad debe redefinirse para no estar basada en la idea de que las hembras más fértiles tienen más éxito en términos evolutivos, ha informado un comunicado de la universidad.
En concreto, esta teoría postulada en 1874, describe el proceso del éxito reproductivo entre organismos, que se determina por el número de crías exitosas que alcanzan la edad de reproducción. Mientras tanto, el estudio publicado por la revista 'Biological Reviews', indica que demasiadas crías pueden suponer consecuencias graves para las madres y el éxito de sus descendientes, y además, subraya que los machos también pueden influir en el éxito evolutivo de su prole.
El estudio indica que en lugar de ayudar a la supervivencia, un número demasiado elevado de crías puede resultar extremadamente costoso y puede reducir el éxito reproductivo de la vida de las hembras. Se señala que en muchas especies, las madres que producen menos crías tienden a criarlas de manera más eficaz, y que en algunos casos, los padres pueden tomar la iniciativa en la crianza de la otra generación desarrollando el "embarazo masculino".
Asimismo, el estudio llega a la conclusión de que la naturaleza favorecerá todos los rasgos físicos que influyan en la fertilidad "óptima" en ambos sexos y que el clima y la disponibilidad de alimentos también afectan la evolución de los procesos reproductivos, factores que Darwin inicialmente pasó por alto.