Un grupo de arqueólogos rusos e italianos han hallado un altar ritual de basalto, construido para un barco sagrado y con una inscripción jeroglífica. Este descubrimiento, calificado por el Servicio de Antigüedades de Sudán como "el más importante de la década", se ha producido en Abu Erteila, a alrededor de 200 kilómetros al norte de Jartum, la capital de Sudán, informa la agencia AGI.
"Todavía estamos estudiando el texto de las inscripciones jeroglíficas en egipcio, pero ya hemos identificado los pergaminos con los nombres de la pareja real que se mencionan, el rey y la reina Natakamani Amanitore, que gobernaron en la época dorada de la civilización meroítica" —entre los siglos 1 a. C. y 1 d. C.—, destacó Eugenio Fantusati, el líder del equipo internacional.
Asimismo, la base para el barco sagrado se encuentra en el "naos" o la célula interna, que albergaba la deidad nubia, la cual se colocaba allí para las procesiones rituales. "El artículo es de una importancia especialmente significativa, puesto que ayuda a comprender mejor el mundo meroítico, todavía poco conocido, y sus relaciones con las civilizaciones vecinas", añadió Fantusati.
El hallazgo es el fruto de la octava ronda de excavaciones que realizó el equipo internacional liderado por Fantusati; su suplente, Marco Baldi, y su codirectora, Eleonora Kórmysheva; entre noviembre y diciembre de 2015.