Un equipo de investigadores de la Universidad de Rochester encabezado por el profesor de ingeniería química Mitch Anthamatten ha creado un material innovador flexible y extremadamente resistente cuya fuerza de recuperación de la forma puede levantar 1.000 veces su propia masa.
En un comunicado de prensa, la universidad explica que, al contrario que otros materiales elásticos, el 'superpolímero' conserva las dimensiones fruto de la deformación indefinidamente y recupera su forma habitual a una temperatura de 35 grados Celsius o superior. "Simplemente con tocarlo vuelve a su forma original", explica el profesor Yuan Meng, que también participó en el proyecto.
"Controlar la temperatura es solo una parte del trabajo", dijo Anthamatten. "También hemos diseñado estos materiales para almacenar gran cantidad de energía elástica que les permita realizar trabajo mecánico durante la recuperación de la forma".
La tecnología se podrá aplicar en el campo de la medicina, por ejemplo en las suturas médicas y piel artificial. También el 'superpolímero' podría revolucionar la industria de la moda facilitando el ajuste de la ropa al cuerpo.