Investigadores de la Universidad de Harvard (EE.UU.) y de Oxford (Reino Unido) han calculado cuántos años puede existir la vida alrededor de estrellas adecuadas para albergarla. En un estudio, publicado por el portal arxiv.org, los científicos señalan que "a menos que la habitabilidad alrededor de estrellas de baja masa quede suprimida, lo más probable es que la vida cerca de estrellas de masa 0,1 veces la solar exista durante diez billones de años a partir de ahora".
El periodo en que la vida puede desarrollarse cerca de la estrella, depende directamente de la duración de la vida del astro, subraya el estudio. La única excepción se daría en el caso de que la estrella dejara de existir por causas no naturales, como una colisión con un cuerpo celeste o bajo la influencia de una fuerza destructiva, aclaran.
Según el estudio, la vida puede darse cerca de una estrella que sea entre 0,08 y 3,7 veces más pesada que el Sol. Además, los investigadores señalan que el peso de la estrella es inversamente proporcional a la duración de la existencia de la vida: cuanto más ligera sea estrella, más tiempo pueden vivir los organismos vivos a su alrededor. Las estrellas más comunes en el universo, las enanas rojas, que se caracterizan por su bajo peso, pueden existir y fomentar la vida a su alrededor durante diez billones de años.
Las estrellas parecidas al Sol experimentan varias etapas de desarrollo (enana amarilla, subgigante, gigante roja) en el curso de su evolución para, al cabo de de 10.000 millones de años, convertirse en una enana blanca. En cualquiera de estos periodos, la estrella puede hacer que las condiciones en planetas cercanos sean inhabitables.
El proceso de formación de estrellas comenzó hace 30 millones de años después del Big Bang. Los sistemas planetarios comenzaron a aparecer mucho más tarde, después de que las explosiones de supernovas formaran una segunda generación de estrellas, y los científicos creen que esto es el punto de partida de la existencia de vida en el universo, que está limitada a la duración de la vida de las estrellas más estables, de hasta unos 10.000 millones de años.