Pero Curiosity, que el 6 de agosto cumple un año de su aterrizaje, hizo un hallazgo revolucionario. Gracias a él sabemos ya que el Universo puede crear y ha creado más de un planeta donde podríamos respirar y vivir.
"Lo que Curiosity descubrió es un medio ambiente similar a la Tierra, en el que si los humanos hubieran estado ahí 3.500 millones de años atrás podrían haber llenado un vaso de agua y probablemente beberla", dice John Grotzinger, el científico principal del proyecto Curiosity.
"Ha sido un año muy bueno", dijo Grotzinger en una entrevista al periódico 'La Tercera'. "Conseguimos la meta primaria de la misión".
Aunque Marte haya perdido la humedad y hoy sea un desierto frío, los datos de Curiosity señalan que el planeta pudo ser un lugar donde los microorganismos podrían haber vivido.
Continuará
Ahora el explorador continúa su misión de dos años para cumplir otro objetivo: encontrar los lugares en Marte que podrían haber sido habitables. El 4 de julio Curiosity se marchó hacia el monte Sharp, una montaña cuyas imágenes muestran a los astrónomos que el monte consiste en varios estratos de diferentes edades geológicas y que en sus minerales podría haber agua.El monte "es como el Gran Cañón (del Colorado), de 5,5 kilómetros de altura y con un estrato encima de otro. Desde la órbita podemos identificar minerales interesantes en la base de la montaña", señala Joy Crisp, la segunda científica de la misión Curiosity. El viaje hacia este destino puede tardar entre siete y nueve meses.