La contaminación de los ricos
Utilizando datos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición de EE.UU., Tyrrell encontró que en comparación con los más pobres, los ricos tenían niveles más altos de mercurio, arsénico, cesio y talio, todos ellos tendentes a acumularse en el pescado y el marisco.
Los ricos también presentaban niveles más altos de benzofenona-3, también conocido como oxibenzona, un ingrediente activo en la mayoría de los protectores solares, que está siendo investigado por la UE y que, según sostienen algunos expertos, en realidad podría favorecer el cáncer de piel.
Asimismo, investigaciones anteriores demostraron que los estadounidenses ricos son más propensos a comer frutas y verduras y menos dados a ingerir comida rápida y 'snacks'.
Plástico y cigarrillos, toxinas de los pobres
Por su parte, según el estudio, los pobres de EE.UU. tienen toxinas asociadas con la exposición a los plásticos y al humo del tabaco.
Las tasas más altas de consumo de tabaco entre las personas de bajos recursos parecen estar asociadas con los mayores niveles de plomo y cadmio. Los estadounidenses pobres también presentaban niveles más altos de bisfenol A, una sustancia utilizada para revestir latas y otros envases de alimentos, y que está prohibida en la Unión Europea, Malasia, Sudáfrica, China y en los biberones de EE.UU.