El Departamento de Salud y Hospitales de Luisiana ha confirmado que la muerte del niño está relacionada con la presencia de una extraña ameba en el agua y ha emitido para los vecinos del estado sureño una advertencia junto con una lista de precauciones que deben tomar antes de beber el agua del grifo, informa 'The Independent'.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CCPEEU, por sus siglas en inglés), ha reportado que los síntomas iniciales de la infección incluyen dolor de cabeza, fiebre, náuseas, vómitos y rigidez en la nuca. Algunos de los síntomas posteriores son: confusión, falta de atención, pérdida del equilibrio, convulsiones y alucinaciones. Después del inicio de los síntomas, la enfermedad progresa rápidamente y por lo general causa la muerte en un periodo de uno a 12 días.
Según los científicos, la ameba, llamada Naegleria fowleri, entra en el cerebro a través del agua contaminada que se inhala por la nariz, causando una infección que destruye el tejido cerebral.
No obstante, los médicos aseguran, que la ameba no puede llegar al cerebro sólo por la ingesta del agua contaminada, y se mata simplemente hirviendo o clorando el líquido antes de consumirlo. Se cree que el niño que murió en Luisiana resultó infectado mientras jugaba en un pequeño tobogán casero de plástico en su jardín.
"El agua es segura para beber y hay precauciones básicas que las familias pueden tomar para protegerse, tales como clorar el agua de sus piscinas y evitar que les entre agua por la nariz a sus miembros", tranquiliza a los habitantes el responsable de Salud del estado, Jimmy Guidry.
Sin embargo, durante los últimos 12 años, desde 2001, en todo el territorio de EE.UU. 32 personas resultaron infectadas por la Naegleria fowleri y solo en dos casos, registrados en el Norte del país, los infectados lograron sobrevivir.