"Olas destructivas arrasarán varias ciudades costeras, y sus habitantes abandonarán las llanuras inundadas o desecadas huyendo de las enfermedades tropicales", agrega el diario, corroborándose en el informe del IPCC presentado la semana pasada en Estocolmo.
En el dosier "se indica que, en los últimos 30 años, cada década ha sido más caliente que la anterior. En todo el planeta se derriten los glaciares. Cada tres años los mares le ganan un centímetro a la tierra firme. La concentración de dióxido de carbono en la atmósfera está al borde de lo permitido: dentro de 10 años habremos sobrepasado los niveles considerados seguros, y las causas son el uso indiscriminado de combustibles y la deforestación".
Estados enteros, como Maldivas, desaparecerán del mapa y el número de refugiados 'ambientales' para el año 2050 alcanzará unas 200.000 o 250.000 personas
De acuerdo con los datos del IPCC, a pesar de todo existe una manera de evitar esta catastrófica situación. "Podemos lograr que la temperatura aumente solo un grado, pero para ello durante algunos años las emisiones de CO2 deben reducirse a la mitad. Actualmente la emisión de gases de efecto invernadero aumenta según el peor de los escenarios", señala el artículo.
"De no haber cambios en la producción de energía, la vida para los millones de personas que viven en las costas será muy difícil. Nueva York será azotada por huracanes como el Sandy. En la mayor parte de Florida tendrán que sustituir los coches por canoas", continúa.
Según el rotativo, en Bangladés el avance del mar dará lugar a un éxodo de personas de proporciones bíblicas, y Estados enteros, como Maldivas, desaparecerán del mapa. "El número de refugiados 'ambientales' para el año 2050 alcanzará unas 200.000 o 250.000 personas", agregó el periódico.
Mientras, en "Australia las olas de calor provocarán prolongadas sequías. Entre las víctimas del calentamiento global también estarán las barreras de coral, que debido al incremento de las temperaturas y la acidificación del océano desaparecerán".
Por su parte, los investigadores del IPCC concluyeron que a finales de siglo las condiciones de vida en el planeta serán cada vez más difíciles si no se toman ahora las medidas necesarias para proteger el medio ambiente.