Físicos de California hallan el Lunojod-1
Un equipo de físicos de la Universidad de California en San Diego estableció la ubicación del primer todo terreno lunar soviético, el denominado Lunojod-1, perdido en la Luna tras varios meses de trabajo desde el exitoso alunizaje en noviembre de 1970.
Las comunicaciones con el aparato —el primer astromóvil no tripulado dirigido a distancia— se interrumpieron en 1971 y desde entonces ni científicos de la Unión Soviética ni de otros países pudieron determinar su paradero.
Finalmente, logró funcionar un reflector láser de diseño francés e instalado sobre el vehículo. La luz reflejada que recibieron en San Diego es la primera señal del aparato desde el 14 de septiembre de 1971, fecha cuando el Lunojod-1 transmitió su último mensaje a la Tierra.
El profesor asociado de física de la universidad de California, Tom Murphy, dijo que su equipo inició una búsqueda direccional del aparato hace dos años en régimen automático y controlaba de vez en cuando las fotografías que recibía de una cámara de alta resolución. Consideraban escasas las probabilidades de encontrar el reflector hasta que identificaron al todoterreno como una mancha luminosa en una imagen a una distancia de decenas de kilómetros del lugar donde supuestamente estaría.
“Solo podíamos buscar en un área del tamaño de un campo de fútbol a la vez”, señaló el profesor explicando la previa ineficacia de la búsqueda. “Corregíamos coordenadas en unos 100 metros y luego teníamos que perder largo tiempo esperando mientras el telescopio aguardaba las condiciones adecuadas para la observación”.
Después de que un observatorio de Nuevo México enviara el 22 de abril otros pulsos de luz láser de 3,5 metros de diámetro a la superficie lunar, uno de los estudiantes del grupo investigador encontró en la foto un destello de luz de tamaño correspondiente al reflector. La segunda observación realizada 30 minutos más tarde permitió al equipo triangular la latitud y longitud del reflector, en otras palabras, calcular su punto exacto en la Luna con un grado de precisión de 10 metros.
Tom Murphy estima que dentro de los próximos meses será posible establecer las coordenadas de Lunojod-1 con tolerancias menores a un centímetro.