"La creación de un organismo con un nuevo código genético nos ha permitido ampliar el alcance de la función biológica a diferentes niveles", explicó Farren Isaacs, profesor asistente de biología molecular, celular y de desarrollo en Yale, y coautor de la investigación.
El nuevo genoma permitió a las bacterias resistir la infección viral mediante la limitación de la producción de proteínas naturales utilizadas por los virus para infectar a las células.
El trabajo ahora sienta las bases para que la bacteria recodificada sea capaz de bio-desarrollar nuevas clases de proteínas y polímeros. Isaacs sostiene que estas nuevas moléculas podrían contribuir a desarrollar una nueva generación de materiales y nanoestructuras que permitan mejorar las vías de administración de medicamentos.
"Dado que el código genético es universal, se plantea la posibilidad de volver a codificar genomas de otros organismos", dijo el científico. "Esto tiene enormes implicaciones en la industria de la biotecnología y podría abrir completamente nuevos caminos de investigación", puntualizó.