Según informa el artículo publicado en la página web de la agencia espacial, los sitios que figuran en el catálogo son algunos de los lugares más extraordinarios de la Tierra que se pueden usar para preparar a las agencias espaciales para vuelos humanos, misiones robóticas y otras actividades fuera de nuestro propio planeta. Estos 'análogos' fueron elegidos para poder ser utilizados en las pruebas de los adelantos tecnológicos y de la metodología de investigación antes de gastar el tiempo y el esfuerzo en poner en marcha algo en el espacio y sirven para estudiar el terreno extraterrestre, su composición y condiciones sin salir de nuestro propio planeta.
La península rusa de Kamchatka es uno de los emplazamientos más ricos en este tipo de áreas por sus terrenos volcánicos similares a los de Marte y la Luna, donde los investigadores podrían estudiar la capacidad de algunos organismos para sobrevivir a bajas temperaturas como las marcianas.
Otro lugar de características extraterrestres se encuentra en la isla de Svalbard, situada al norte de Noruega, donde los equipos de investigación formados por geólogos, biólogos e ingenieros, han dado lugar a algunos de los instrumentos que se utilizan actualmente en Marte a bordo del vehículo de exploración espacial Curiosity.
Otros sitios, como el desierto de Atacama en Chile, con sus increíbles paisajes lunares, pueden utilizarse para determinar qué tipo de superficies puede recorrer un vehículo de exploración espacial, qué tipo de cuestas está capacitado para subir y bajar y si puede recoger muestras de la superficie del suelo y de las rocas.
Muchos de estos sitios presentan condiciones muy hostiles y sirven como hogar para formas de vida extraordinarias. Al estudiar estas formas de vida, los astrobiólogos pueden desarrollar métodos y teorías para estudiar ciertos ambientes fuera de la Tierra que podrían ser el hogar de organismos comparables.
A diferencia de las islas remotas o de los desiertos de América del Sur, algunos de los sitios que aparecen en el catálogo, como cráteres causados por el impacto de meteoritos en Arizona y el Río Tinto en España, son mucho más accesibles. Las aguas rojas ricas en metales pesados del río Tinto durante décadas han servido como el análogo más popular de Marte, ofreciendo el hábitat ideal para algunos microorganismos, lo que lleva a pensar que en el caso de que la vida exista en el Planeta Rojo, podría ser similar a estos microbios.
"Examinamos algunos tipos de áreas de interés que hay en Marte y la Luna, y cómo encontrar algo similar en la Tierra", explica Oliver Angerer, Coordinador de Ciencia de la exploración humana de la Agencia Europea del Espacio (ESA, por sus siglas en inglés). "Por ejemplo, si usted quiere estudiar los tubos de lava en Marte, ¿cuál es el equivalente más cercano en la Tierra? Dependiendo de las necesidades de la misión, se puede elegir Islandia, Hawái o Tenerife con sus paisajes volcánicos", especificó.
El catálogo, que recoge sitios de los cinco continentes, se basa en el conocimiento de una amplia red de expertos planetarios y fue creado para el Programa de Estudios Generales de la ESA por los investigadores de la Universidad Abierta del Reino Unido. El listado incluye la información más completa sobre el viaje a estos lugares: desde las estaciones de servicio cercanas a qué tipo de fauna peligrosa habita en la zona.