Laser Power Systems (LPS), de EE.UU., está trabajando en un motor que funcione a base de torio, un elemento radioactivo y uno de los materiales más densos del planeta. Según destacan los diseñadores, es un combustible perfecto, ya que un gramo genera más energía que 28.000 litros de gasolina. En comparación con los demás materiales radioactivos, produce unas 10.000 veces menos residuos y no produce una reacción de cadena sin una serie condiciones especiales, con lo cual, en caso de accidente, su desintegración dentro del reactor se detendrá automáticamente.
La última versión del motor capaz de resolver el problema de los gases de efecto invernadero pesa 227 kilos y es suficientemente pequeño para caber en el capó de la mayoría de los coches convencionales. Funciona gracias a un láser basado en torio, cuyo haz crea vapor de agua dentro de miniturbinas, generando electricidad para conducir un coche. La empresa asegura que no hay amenaza alguna para la salud humana ya que los efectos radioactivos del torio se pueden neutralizar con una capa de papel aluminio.
Sin embargo, LPS advierte que es muy poco probable que su innovación interese a los productores de coches, que están mucho más interesados en los motores a base de gases. Según los comentarios del director ejecutivo de la compañía, Charles Stevens, a mashable.com, la industria automovilística será la última en aceptar la tecnología y solo empezará a considerar la posibilidad tras décadas de uso del torio en otros sectores.