Del Ártico a la Luna: ¿Se trasladará la guerra por los recursos a nuestro satélite?

Diversos científicos creen que la exploración de los recursos naturales de la Luna es inevitable, lo que podría desencadenar varios conflictos en la Tierra.
"En cierto sentido, podemos considerar a la Luna como el séptimo continente de la Tierra", cita el diario ruso 'Vzgliad' a Lev Zeleny, director del Instituto de Estudios Espaciales.

El científico afirma que ya a mediados del siglo XXI el satélite terrestre puede convertirse en objeto de fricción entre varias potencias, sobre todo por sus zonas cercanas a los polos y por la posibilidad de construir una base lunar capaz de reemplazar a la Estación Espacial Internacional.  

Así las cosas, las guerras provocadas por los recursos naturales serían similares a la actual expansión de la influencia de las distintas potencias sobre la plataforma continental en el Ártico, señala Zeleny. 

La comparación con las enormes riquezas naturales del Ártico no es casual. Además de las enormes cantidades de hielo que albergan sus polos, las reservas de la Luna incluyen principalmente minerales raros que son muy escasos en la Tierra, tales como titanio, uranio o el isótopo de helio-3, que puede usarse en la fusión nuclear y resolver el problema energético de nuestro planeta durante miles de años. 

"Si no habrá otra alternativa, los recursos lunares serán una buena opción para resolver los problemas del agotamiento de los recursos terrestres", indicó Zeleny. 
 
Mientras tanto, la experiencia de las misiones espaciales de larga duración que tiene Rusia podría ser requerida en este sentido. Actualmente, en Rusia se desarrolla un programa espacial orientado a la exploración de la Luna y programado hasta el año 2023. Se prevé el lanzamiento de las sondas orbitales que deben aterrizar y tomar muestras de suelo de los polos lunares.

También se informa que allí donde se produzca el aterrizaje de la sonda Luna-Resurs, planeado para 2019, puede localizarse la futura base lunar rusa.