Según ha indicado Shostak durante una charla del Departamento de Conceptos Avanzados de la NASA en la Universidad de Stanford (EE.UU.), para entonces se habrán explorado un millón de sistemas estelares del universo, "una cantidad razonable para poder encontrar señales electromagnéticas alienígenas".
Sus conclusiones se basan en las observaciones de planetas realizadas por el telescopio espacial Kepler que "ha demostrado que la Vía Láctea probablemente está llena de mundos capaces de albergar vida tal como la conocemos".
"Si una de cada cinco estrellas contiene al menos un planeta donde la vida es posible, en nuestra galaxia hay del orden de decenas de miles de millones de mundos similares a la Tierra", enfatizó.
Shostak y sus colegas creen que formas de vida inteligente serán capaces de enviar señales electromagnéticas hacia el cosmos, "como la civilización humana hace todos los segundos todos los días".