El misterio de una tecnología perdida capaz de convertir a los humanos en piedra

Girolamo Segato en el siglo XVIII inventó un proceso de mineralización de los restos humanos. Desgraciadamente, el miedo a la persecución destruyó sus estudios dejando solo una pequeña cantidad de pruebas de la existencia de su increíble tecnología.
El autor de la tecnología de petrificación humana, el profesor italiano Girolamo Segato, empezó a especializarse en dicho proceso después de visitar Egipto en 1818 y quedarse fascinado por las momias del antiguo país, explica el portal Atlas Obscura.

Al regresar a Italia Segato se puso a desarrollar nuevos métodos de momificación y así llegó a crear su propio método único de preservar el tejido humano mediante un proceso de mineralización, que convierte los restos en una especie de mármol. La reacción a su método fue polémica: algunos se vieron sorprendidos por la transformación tan especial de los cadáveres, mientras que otros relacionaron su trabajo con un misticismo egipcio antinatural.

 

Después de una irrupción en su casa, el profesor quemó todos sus papeles y estudios, y al morir se llevó el secreto de la tecnología a la tumba. Pese a que los científicos modernos han desarrollado métodos alternativos de petrificación de los restos humanos, nadie ha sido capaz de explicar el proceso inventado por Segato, con lo que sigue siendo un misterio.


 
Hoy en día la única evidencia que queda de su obra es una escasa cantidad de reliquias sombrías que permanecen en el museo anatómico de la Universidad de Florencia: una cabeza cortada y un pecho femenino convertidos en una piedra eterna. También existe la denominada Tabla de Segato, un óvalo de madera incrustado con trozos de huesos, músculos e intestinos petrificados.