Según informa la revista 'Astronomy Magazine', captar la gigantesca explosión solar ha sido un verdadero golpe de suerte para los astrónomos, teniendo en cuenta que el observatorio fue apuntado a ciertas áreas del Sol un día antes de que se produjera la CME.
En el video se puede observar cómo la cortina de material solar, de unos 29.700 grados Celsius, estalla hacia fuera a una velocidad de 2,5 millones de kilómetros por hora.
De acuerdo con los científicos, la explosión solar ha provocado fuertes turbulencias en Mercurio, mientras que La Tierra se mantuvo a salvo de esta llamarada masiva, ya que actualmente orbita a una distancia de más de 148 millones de kilómetros del Sol.