Tecnologías digitales ayudan a conservar pinturas rupestres mexicanas
Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH) someten a proceso de digitalización más de dos mil pinturas rupestres distribuidas en la zona arqueológica La Pintada, en el norte del país, informa Prensa Latina.
Las pinturas distribuidas en el cañon natural que forma parte de la zona arquológica fueron creadas desde hace 1,200 años por cazadores-recolectores que habitaron estas tierras, así como los pueblos que se asentaron en el territorio del estado de Sonora en los tiempos coloniales.
Según los científicos, de unas 2,500 representaciones gráficas de La Pintada se ha digitalizado ya alrededor del 70 por ciento. El trabajo que se realiza a partir de 2007, bajo la dirección del arqueólogo Manuel Graniel, servirá para el estudio, así como para la planeación de un esquema de monitoreo para la preservación de la pintura rupestre.
Según explicó Manuel Graniel, “para el trabajo digital lo que hacemos es plasmar fotográficamente cada uno de paneles donde hay pintura rupestre y, a partir de un método de retículas, unir los diseños para obtener cada detalle, tal y como están en el sitio”. De esta manera, en el caso de aquellas imágenes que están en lugares poco accesibles, los científicos pueden reproducirlas en gran formato y llevar a cabo su análisis.
Manuel Graniel explicó que gracias a las investigaciones se sabe que La Pintada constituyó un importante espacio para diversos grupos humanos, tanto cazadores-recolectores que la habitaron durante los siglos XII y XIII, como de indígenas seris, yaquis y pimas, quienes emplearon el lugar para sus rituales entre los siglos XVII y XVIII.
Las creaciones más antiguas revelan la cosmovisión de los habitantes, pues se creía que al representar la fauna local se asegura buena caza y alimentos. En los siglos XVII y XVIII muchos grupos nativos buscaron refugio en el cañón, los científicos lograron identificar tres estilos de la época.
La lucha contra los colonizadores se presenta en algunas pinturas del sitio. En particular, los grupos indígenas acostumbraban representar a los españoles en postura de cabalgata, pero sin caballo, lo cual hacían bajo la creencia de que al plasmarlos de esa forma, los invasores ya no los atacarían, explican los investigadores.
Según los arqeólogos, el registro digital de estas pinturas rupestres, también servirá para colocar fotografías en gran formato de aquellas pinturas que no están a la vista del visitante dada su ubicación.