Los restos pertenecieron a una hembra de mamut que vivió hace unos 43.500 años. En el momento de la muerte tenía 60-80 años de edad, como lo demuestra el severo desgaste de dientes de sexta generación y crecimientos óseos en las falanges. Los paleontólogos suponen que el animal murió como consecuencia de un accidente, no de hambre: su estómago estaba lleno de alimentos, incluso aún se conserva una hoja verde de hierba.
Se han conservado tejidos blandos. Por lo tanto, ¿se le puede clonar?
El principal valor del Maloliajovski mamut estriba en que sus restos conservan tejidos blandos e incluso sangre. "Se han conservado tejidos blandos. Por lo tanto, ¿se le puede clonar?", preguntó Putin. Los científicos del museo le aseguraron que están colaborando con expertos de Corea del Sur con este fin.
Según datos de la Universidad Federal Nororiental, que gestiona el Museo del Mamut de la ciudad de Yakutsk, este establecimiento colabora con la Fundación de las Investigaciones Biotecnológicas (SOOAM por sus siglas en inglés) de Corea del Sur. Sus especialistas fueron los primeros en el mundo en clonar un perro y un lobo.
Además del mamut, Putin pudo ver en Yakutsk los únicos restos del mundo de un perro que vivió en la época de los mamuts: hace 12.500 años.