"La Luna inspira a soñar y el mundo de la ciencia siempre va en eso por delante", dijo a RT Roger-Maurice Bonnet, científico del Instituto Internacional de Ciencias del Espacio, Suiza. "El ambicioso proyecto de colonizar la Luna ya podría tener fecha. El programa espacial ruso ya trabaja en ello", añadió el experto.
Según Bonnet, el proyecto comenzará en 2018 con la construcción de una maqueta de la base a escala real. Invertir en el proyecto es necesario porque, según aclara el científico, los recursos de la Luna son incalculables. Se estima que se hallan cantidades de helio-3 suficientes para abastecer a la Tierra de energía ecológica por al menos 5.000 años.
"La Luna es una fuente excelente de datos, ya que es un cuerpo cercano. Marte está demasiado lejos. Además, la Luna representa un gran interés para la ciencia, para el estudio de los fenómenos físicos", comentó Mijaíl Panasiuk, director del Instituto de Física Nuclear de la Universidad Estatal de Moscú.
"Creo que la colaboración internacional es cada vez más importante. Ya logramos hitos más simples y ahora tenemos que alcanzar objetivos más complejos. De ahí el énfasis en la cooperación y dejar atrás la competencia", dijo Carle Pieters McGetchin, profesora de la Universidad de Brown, EE.UU.