Según la NASA, las llamaradas generadas en el Sol pueden afectar sensiblemente el campo magnético de la Tierra.
La gigantesca mancha que presenta el Sol fue descubierta esta semana y ha sido llamada AR 2192. En tan solo un par de días la mancha ha ido creciendo hasta alcanzar el tamaño de Júpiter, con 140.000 kilómetros de diámetro.
Según los expertos, se trata de la mancha más grande observada en el Sol
desde el principio del ciclo solar actual, es decir, desde enero de 2008.
Desde que comenzó la semana, se han registrado 27 llamaradas solares de clase C (pequeñas y de consecuencias poco notorias), 8 de clase M (de tamaño mediano que pueden generalmente causar ligeros apagones en el radio), y 2 de clase X (fenómenos de gran magnitud).
De acuerdo con la NASA, las erupciones solares que pueden repetirse en los próximos días no afectan a los seres humanos, pero cuando son lo suficientemente intensas, pueden afectar el campo magnético de la Tierra, causando un problema de comunicación en todo el mundo.