¿Todavía no está impresionado? Pues eche un vistazo al siguiente video.
En comparación con los dos primeros prototipos, el 3,0 es especialmente ligero y compacto gracias a la utilización de materiales de fibra de carbono. El vehículo puede ascender hasta 9.800 metros y volar a esta altura a una velocidad de 200 kilómetros por hora.
Por supuesto, tan pronto como empezamos a hablar de coches voladores, una serie de problemas de seguridad entran en juego, pero, al parecer, los ingenieros de Aeromóvil han dotado al vehículo con las características y los equipos de seguridad adecuados.
"Con los dispositivos GPS instalados, un piloto automático y un sistema de paracaídas de emergencia, así como un juego completo de faros LED y señales de giro homologados para el tráfico urbano, el artilugio revolucionario es ahora el más cercano de su clase a estar listo para el uso público", apunta el portal de ideas estadounidense PSFK.
El Aeromóvil ya ha sido 'pre-certificado' por la Autoridad de Aviación Civil de Eslovaquia. Sin embargo, no está claro cuándo va a estar disponible a la venta.
"Lo que la gente necesita saber es que la certificación puede tomar años y las pruebas pueden necesitar mucho tiempo", señaló Stefan Vadocz, jefe de relaciones públicas de la compañía, citado por 'The Washington Post'.