El proyecto Google Glass pierde interés tanto entre los usuarios como entre los propios desarrolladores del 'gadget', quienes no creen que las gafas puedan convertirse en un producto solicitado en el mercado. Según Reuters, de los 16 creadores del 'gadget' contactados por la agencia, nueve han confesado que ya han abandonado el proyecto.
"Si hubiera 200 millones de Google Glass vendidas, habría una perspectiva distinta. No hay mercado en este momento", admite Tom Frencel, director de la empresa Little Guy Games, que estudió desarrollar aplicaciones para Google Glass antes de apostar por otras plataformas.
Sergey Brin, el cofundador de Google que se presentaba habitualmente en cada evento con las gafas de Google puestas, sorprendió a todos al no llevarlas en el último acto de Silicon Valley. A la pregunta de un periodista, Brin respondió que se había dejado su Google Glass en el coche.
Al mismo tiempo, Google ha anunciado el cierre de todas sus tiendas de venta de Google Glass, informa el portal Techworld. La causa oficial es en que los establecimientos ya no son necesarios porque los clientes adquieren las gafas vía Internet.
Sin embargo, los representantes de Google no quieren 'reconocer la derrota'. "Estamos llenos de energía y con más fuerza que nunca sobre la oportunidad que representan las Google Glass", afirma Chris O'Neil, jefe de operaciones de negocio del 'gadget',