La Unión Internacional Para la Conservación de la Naturaleza (UICN) sometió a crítica a la decisión de excluir a las Islas Galápagos de la lista de objetos del Patrimonio de la Humanidad que se encuentran bajo peligro.
Tal decisión fue tomada por el Comité del Patrimonio de la Humanidad con el fuerte apoyo del Gobierno de Ecuador. Las dudas de la UICN están explicadas en un informe de prensa publicado en el sitio web de la Unión.
En 2007, las Islas Galápagos fueron inscritas en la lista de objetos del patrimonio mundial en peligro debido a que varias especies invasivas amenazaban a las especies nativas de la zona. Además, la naturaleza del archipiélago se iba viendo dañada por el turismo desenfrenado y la pesca excesiva.
A finales de julio de 2010, los miembros del Comité del Patrimonio de la Humanidad decidieron que los esfuerzos de Ecuador emprendidos para paliar la situación en las islas son suficientes para considerar a las Galápagos fuera del peligro.
Entre las medidas tomadas por el Gobierno del Ecuador, citadas en el sitio web gubernamental, se encuentran el control migratorio, la implementación de la tarjeta de residencia, el control del ingreso de especies exógenas, el manejo de la actividad turística que se ha reducido en un 7% y la implementación de una nueva etapa en la gobernabilidad de Galápagos, mediante la creación de un Consejo de Gobierno.
Sin embargo, a pesar de los positivos resultados de tres años de trabajo en este ámbito, la UICN subraya que la exclusión del archipiélago de la lista es prematura y agrega que los representantes de la organización se habían manifestado en contra de esta desición.
En su informe la Unión reconoce los esfuerzos de Ecuador para la salvación de las islas, pero indica que no obstante las medidas, la situación sigue siendo crítica. Gracias a su posición alejada de las costas continentales, las islas Galápagos, que deben su nombre a las tortugas gigantes que lo habitan, constituyen un "laboratorio natural". Aquí se encuentran varias especies de fauna y flora únicas en el mundo, lo que sugirió al famoso científico Charles Darwin su teoría de la evolución y selección natural de las especies. El archipiélago fue declarado en 1978 Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.
Los hombres introdujeron en las islas varias especies ajenas a su sistema natural y su reproducción habría podido destruír por completo la única fauna y flora del archipiélago. En el marco de las medidas de salvación los ecólogos tuvieron que eliminar algunas especies, en particular, en el año pasado, exterminaron la populación de cabras en la isla de Santiago.