'Ayatollah, deja a esos niños tranquilos', nuevo 'hit' de Youtube
El grupo de músicos canadienses de origen iraní Blurred Vision presentó una nueva versión del famoso tema 'Another Brick in the Wall', de la legendaria banda Pink Floyd, que se ha convertido en una protesta contra el régimen iraní.
Blurred Vision, una banda de rock formada por dos hermanos cuya familia se escapó de Irán en los años 80 y se instaló en Toronto, modificaron el tema clásico de 1979, reemplazando en el estribillo la palabra 'teacher' ('profesor') por 'Ayatollah' (título religioso chií que se les otorga a los mayores líderes espirituales islámicos).
Así, sin hacer transformaciones considerables, lograron cambiar por completo el sentido de la letra que culmina con el llamamiento 'Hey, Ayatollah, leave those kids alone!' ('Ey, Ayatollah, deja a esos chicos tranquilos') y, según los autores, encaja perfectamente en la situación de Irán.
Sepp, de 28 años, y Sohl, de 35 -los hermanos prefieren ocultar su verdadero apellido para proteger de represalias a sus familiares que aún residen en Irán–, explican que su misión es cambiar la percepción de los jóvenes iraníes en el mundo. Contaron que cuando presentaron la canción les llegó un mensaje grabado por un admirador iraní que no paraba de decir: "Mantengan nuestra voz viva. Si no lo hacen ustedes, nadie nos oirá".
La banda grabó el tema con el beneplácito de uno de los fundadores de Pink Floyd, el ilustre Roger Waters. "No queríamos presentarla sin su autorización, pero él nos respondió al instante y dijo 'de aquí en adelante, esta versión de la canción es suya'", dijo Sepp.
Luego los hermanos filmaron un vídeo sin disponer de presupuesto alguno, pero sí contando con la ayuda del cineasta iraní Babak Payami y del productor canadiense Terry Brown. Creado a base de imágenes de crónicas hechas durante las últimas protestas en Teherán, el vídeo busca inspirar a los adolescentes del país islámico a luchar por su libertad. La grabación se ha hecho muy popular en Youtube sumando más 170.000 reproducciones y se ha convertido en un himno clandestino de los que se oponen al régimen del Ayatollah.
Los músicos esperan que con su pequeña aportación lograrán cambiar un poco la opinión de Occidente acerca de Irán y de su juventud. "Yo creo que en un tiempo la gente podrá conocer mejor a los iraníes. Ahora se trata de construir un puente entre el este y el oeste. Por suerte esa canción ayuda un poco en ese asunto", dice Sohl.