Los aparatos submarinos Mir-1 y Mir-2 hallaron en el lago Baikal compuestos orgánicos extraños de una naturaleza todavía desconocida para los científicos.
Los batiscafos estaban sumergiendo al lecho del lago en la zona del volcán de barro 'San Petersburgo' en la depresión sureña de Baikal, cuando los especialistas que estaban dentro de los aparatos notaron unas "extrañas formaciones esféricas".
De momento los especialistas no pueden decir por seguro qué es lo que se acaban de hallar, pero no excluyen la posibilidad de que las esferas puedan ser “un tipo extraordinario de compuestos orgánicos”.
“Sospechamos que esta es una nueva forma de vida, anteriormente desconocida. Son unos glóbulos de 1-3 centímetros de diámetro, llenos de sustancias orgánicas muertas. Por lo visto, es una colonia de microbios desconocida”, explicó el director del Instituto Limnológico de la Academia de Ciencias de Rusia, Mijail Grachiov, citado por RIA Novosti.
El científico subrayó que estos nuevos organismos viven donde fue registrado el afloramiento de metano. “Es probable que ellos se alimenten del metano”, supuso. En su opinión, los organismos son el descubrimiento más importante hecho con la ayuda de los Mir en el lago.
El objetivo principal de las expediciones submarinas fue la investigación de los hidratos de gas, es decir, del hielo con gas encerrado en su estructura molecular, que se considera uno de los combustibles del futuro.
Durante las inmersiones del 9 de agosto al lecho, fue encontrado un contenedor especial transparente para transportar los hidratos a la superficie. Además, los científicos tomaron pruebas biológicas del agua del lago.
Los célebres batiscafos rusos Mir 1 y Mir 2 iniciaron la nueva temporada de investigaciones el 1 de julio en el marco de la expedición 'Los Mir en Baikal'. Esta vez están programadas cerca de 60 expediciones, que tienen como objetivo el estudio de condiciones sísmicas, tectónicas y biológicas del mayor depósito de agua dulce del mundo.
La expedición cumple su tercera edición ya que en 2008 los submarinos buscaron nuevas especies de fauna y flora, y bajaron al lugar más profundo del lago que se sitúa en la parte central del mismo. Y el principal resultado de la expedición de 2009, fue el hallazgo de los hidratos de gas y el estudio de un yacimiento submarino de petróleo.