El portal WikiLeaks ha revelado este viernes más de 400.000 documentos de carácter reservado sobre la guerra de Irak, lo que supone la filtración contra el Pentágono más grande en la historia de Estados Unidos. Una fuente cercana a la conocida web comentó que el material abarca el período entre 2004 y 2009, lo que comprende casi la totalidad del conflicto que comenzó en 2003.
La filtración es mucho mayor que la que ya protagonizó en julio, cuando publicó 92.000 informes secretos de las Fuerzas Armadas de EE. UU. sobre Afganistán.
Tras el destape de los archivo realizado por WikiLeaks sobre la guerra de Irak, el Departamento de Defensa ya ha expresado en un comunicado que condena la revelación no autorizada de información clasificada.
El Ministerio de Defensa estadounidense, que teme que la publicación de dichos documentos podría entrañar una amenaza a la seguridad nacional, ya se había preparado reuniendo un grupo de trabajo, compuesto por más de 120 expertos, con el objetivo de minimizar el efecto negativo que podía producirse tras la fuga de información. "Nuestra preocupación es la amenaza a las personas, nuestra gente y nuestros equipos", dijo el coronel David Lapan, portavoz del Pentágono,. "Irak todavía está tratando de formar su Gobierno. Los temas que se abordan allí son de carácter sensible. ¿Quién sabe cuál podría ser su impacto?”.
Pero no sólo el Pentágono se estaba preparando. Numerosos medios de comunicación, que al igual que el pasado mes de julio, han hecho caso omiso a los insistentes llamamientos de la Administración norteamericana de no divulgar la abundante información confidencial, ya están ‘corriendo la voz’ sobre el material publicado.
Así el canal Al Jazeera ya ha difundido algunas de las primeras revelaciones ‘de interés’: resulta que el Ejército de EE.UU. ha 'encubierto' las torturas de los detenidos por el Estado islámico y ha matado desde la invasión estadounidense a más de 100.000 iraquíes, de los que 70.000 eran civiles. Nos esperan más revelaciones.