Según la actualización mundial de 2010 del Programa de la ONU sobre VIH/sida (ONUSIDA), el número total de muertes y de nuevas infecciones producidas por el virus disminuyó hasta el 20% en todo el mundo. La organización valora positivamente la medidas que la comunidad sanitaria mundial estuvo llevando a cabo para contener la divulgación de la efermedad y erradicarla.
Sin embargo, a pesar de estos datos tan optimistas, los expertos subrayan que, para finales de 2009, más de 33,3 millones de personas en todo el mundo son portadoras del virus, una cifra 'ligeramente superior' a los 32,8 millones de personas con sida registradas el año anterior.
En cuanto a este año los especialistas calcularon 2,6 millones de nuevas infecciones de VIH, un 20% menos en comparación con el auge de la epidemia en 1999. En 2004, a causa de las enfermedades provocadas por el sida, murieron 2,1 millones de personas; en 2009, 1,8 millones.
La región más afectada por la epidemia siguie siendo África, en la que se producen alrededor del 70% de las infecciones. Sin embargo, en varios países de África subsahariana, los números de la enfermedad están bajando. La situación contraria se observa en Europa del Este y en Asia Central, donde se registra un brote de sida y de muertes asociadas. Los especliastas vinculan estos datos con la actividad de los drogadictos y los homosexuales.
En cuanto a América Latina, de acuerdo con el documento de la ONU, el número de nuevas infecciones registradas en 2009 en esta región fue cerca de 92.000, lo que es unos 7.000 casos menos que en 2001, con 99.000 infecciones nuevas. Actualmente, en América Latina viven 1,4 millones de personas con VIH. En 2002, el número de personas que tenían el virus era 1,1 millones.
En total, al menos 56 países han estabilizado o conseguido descensos significativos de las tasas de nuevas infecciones de VIH. El éxito de la lucha contra la enfermedad se debe a la extensión del tratamiento antirretroviral, así como al aumento del acceso a los servicios de prevención y a los cuidados médicos.
A los intentos de combatir el sida, asimismo se ha sumado el Papa Benedicto XVI. El pontífice en su libro 'Luz del mundo', que salió ayer a la venta, justificó el uso de preservativos en 'algunos casos'. Según el Papa, ello puede ser un primer acto de moralización, de responsabilidad, informó EFE. Los activistas contra el sida alabaron las declaraciones del Papa, opinando que ahora otros líderes religiosos podrían seguirle en recomendar el uso del profiláctico para prevenir el sida y no dejarlo sólo 'en manos de Dios'.