La Cumbre de Cancún concluyó con el aplazo del Pacto de Kyoto
La Cumbre de Cancún de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático concluyó el aplazo del Protocolo de Kyoto y con la creación del "fondo verde".
Pese a la oposición de Bolivia, fue aprobado un principio de acuerdo, por el que más de 190 países se comprometieron a reanudar las negociaciones sobre la prórroga del Protocolo de Kyoto en 2011 ya que países como Japón y EE.UU. no aceptan las condiciones para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Otros temas claves de la reunión han sido la creación de un Fondo Verde y la implantación de medidas para la adaptación al cambio climático.
El Protocolo de Kyoto
El principal objetivo de la reunión ha sido la prórroga del protocolo de Kyoto, que hasta el momento es el único referido a la reducción de gases contaminantes y caduca en 2012. El documento fue firmado en 1997 por 37 países desarrollados y determina las metas obligatorias de reducción de emisiones contaminantes a 37 países. Por el momento, los países desarrollados deben reducir los gases causados por la deforestación entre un 7% y un 14%, pero un nuevo protocolo obligaría a los países firmantes a un recorte de entre el 25% y el 40%. Además, se espera que las emisiones de gases de países grandes como India y China sean monitoreadas. EE. UU. jamás se adhirió al convenio.
La discusión también abordó el tema del freno a la tala de bosques. Los países industrializados se han comprometido a proporcionar unos 4.000 millones de dólares para las naciones con bosques. Los más beneficiados según se espera serían entonces Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, México y Perú.
Votos a favor y en contra
El texto de acuerdo ha recibido el visto bueno de La Unión Europea (UE) y los Estados Unidos. China también se manifestó “satisfecha” con el proyecto de reducir las emisiones del invernadero.
Las ONG Greenpeace y Oxfam también han apoyado la iniciativa que, según expresaron, contiene avances “sustanciales”. El responsable de Cambio Climático de Greenpeace, Wendel Trio, elogió la propuesta de crear de un Fondo Verde, y el compromiso de los países desarrollados a seguir recortando sus emisiones de gases del efecto invernadero.
Mientras tanto, la posición de Bolivia contrastó con las delegaciones favorables al texto. El país latinoamericano rechazó el proyecto: "con mucho respeto, Bolivia no está dispuesta a suscribir un documento que signifique una elevación de la temperatura que ponga más vidas humanas en una situación cercana a la muerte, cuando ya tenemos 300.000 personas que mueren el año", declaró el jefe negociador boliviano, Pablo Solón.
El Fondo Verde
Tras la reunión fue acordada la consolidación del denominado Fondo Verde, que destinaría a partir del año 2020 unos 100.000 millones de dólares al financiamiento de los países en desarrollo, con el objetivo de ayudarlos a reducir las emisiones y adaptarse a los peores efectos del calentamiento global.
El documento estipula que los países ricos deben aportar un 1.5% de su Producto Interior Bruto (PIB) a la financiación. Las metas del plan son reducir el calentamiento global en 2 grados centígrados y ayudar a los países pobres a proteger sus bosques. El cumplimiento de las promesas de financiación será supervisado.
La cumbre de Cancún viene precedida por el fracaso de la conferencia climática en Copenhague, en la que también se planeaba firmar un convenio global.