Un estilo de vida saludable, clave en la prevención del cáncer
El Día Mundial contra el Cáncer se celebra cada año el 4 de febrero. Esta fecha fue establecida por la Unión Internacional contra el Cáncer en 2005 para atraer la atención pública hacia este problema global, recordar el peligro de las enfermedades oncológicas y promover medios para aliviar la carga mundial de la enfermedad, así como la prevención del cáncer y el aumento de la calidad de vida.
El cáncer es un proceso de crecimiento y diseminación incontrolados de las células. Puede aparecer prácticamente en cualquier lugar del cuerpo. El tumor suele invadir el tejido circundante y puede provocar metástasis (propagación a zonas distintas de donde se inició) en puntos distantes del organismo. El cáncer es la principal causa de mortalidad en todo el mundo. La OMS calcula que, de no mediar intervención alguna, 84 millones de personas morirán de cáncer entre 2005 y 2015.
Según el informe de la OMS publicado en 2008, en la mayor parte de los países desarrollados el cáncer es la segunda causa principal de mortalidad después de las enfermedades cardiovasculares. Esta tendencia comienza a registrarse asimismo en los países 'en transición' y en países de ingresos medianos, por ejemplo en América del Sur y Asia. Más de la mitad de los casos de cáncer se registran ya en países en desarrollo.
Muchos tipos de tumor se podrían prevenir evitando la exposición a factores de riesgo comunes y siguiendo un estilo de vida saludable. Así, según informó el oncólogo español Juan Jesús Cruz de Salamanca, existen "once cosas que podríamos hacer todos" y con las que se reduciría la incidencia en un 60% en los próximos 20 años. Entre las recomendaciones "fundamentales" que evitarían el desarrollo de muchos de los tumores está el no fumar, no beber alcohol, tener una dieta equilibrada, hacer ejercicio una media hora tres veces por semana y protegerse del sol, informa EFE.
Asimismo, existe una serie de infecciones que causan cáncer o aumentan el riesgo de la enfermedad, como la bacteria helicobacter pylori, asociada con el cáncer de estómago; cierto tipo de hepatitis que causa cáncer de hígado, o el virus del papiloma humano vinculado con el cáncer de cuello uterino. En este caso es sumamente importante la inmunización y el tratamiento de las infecciones.
Además, un importante porcentaje de cánceres se puede curar mediante cirugía, radioterapia o quimioterapia, especialmente si se detectan en una fase temprana. Como indicó anteriormente el jefe oncólogo del Ministerio ruso de Salud y Desarrollo social, Valeri Chíssov, el 95% de los casos de cáncer son curables si se diagnostican en la I y II etapas.