Las advertencias de los astrónomos sobre posibles choques con asteroides son cada vez más frecuentes. Por ejemplo, la semana pasada los especialistas del Instituto de Astronomía informaron de que en el observatorio Pan-STARRS mediante el telescopio PS1 se había establecido un récord ya que se habían registrado 19 asteroides acercándose a la Tierra durante solo una noche. Los expertos indicaron que aunque estos cuerpos celestes no representan un peligro inmediato, no se puede excluir su colisión con nuestro planeta durante los próximos 100 años.
Todos estos informes comprueban un hecho bien conocido: la Tierra necesita una protección global. Los científicos rusos están seguros de que el nuevo sistema de vigilancia internacional, conocido como IGMASS, podrá facilitar tal protección, alertando sobre posibles catástrofes naturales o tecnológicas en cualquier parte del planeta, incluso la colisión de un asteroide.
Iniciada por las organizaciones públicas y científicas rusas, la idea del IGMASS fue apoyada por la Academia Internacional de Cosmonáutica en 2008. La idea del proyecto se basa en que dispositivos especiales situados en la Tierra o en el espacio detectarán los posibles 'precursores' de los desastres naturales que se manifiestan como anomalías de la geosfera y, a partir de estos resultados, el pronóstico de los eventos catastróficos.
En noviembre de 2011, en el marco de la Cumbre de los jefes de agencias espaciales, los directores de las agencias espaciales del mundo en Washington (EE. UU.) discutieron cuestiones de la realización del proyecto IGMASS. En la declaración firmada por todas las agencias que participaron en la Cumbre, se subraya la necesidad del desarrollo de los medios para pronosticar y prevenir las catástrofes globales.
Durante el año 2010, IGMASS recorrió un largo camino desde ser una idea científica hasta convertirse en un concepto bien estructurado de un sistema técnico complicado, que reuniría medios de seguimiento aerocósmico de varios países para alcanzar la meta de la prevención efectiva de los desastres, que siguen siendo una de las amenazas al desarrollo estable de la humanidad.
Según informa la página web de la Agencia Federal Espacial rusa, Roscosmos, el director del proyecto IGMASS, Vladímir Ménshikov, espera que en 2011 la iniciativa adquiera un nuevo impulso al unirse al proyecto varios países. Así, durante los recientes meses han mostrado su interés por el sistema de seguimiento global China, Indonesia, Vietnam, algunos países de África occidental, así como Argentina y Australia.