¿Qué hacen los científicos en la Antártida?

¿Cuán importante es el estudio del fondo marino? ¿Cómo están relacionados los cambios climáticos con la población de animales que lo habitan?

Los científicos rusos que estudian las profundidades del mar en la Antártida tratan de contestar precisamente estas preguntas. Los miembros de este equipo se sumergen para ver lo que sucede abajo diariamente durante la corta temporada de verano.

Boris Sirenco, uno de los científicos que trabajan cerca del Polo Sur, explica:“Dentro de 3 o 5 años cuando repitamos este estudio, veremos qué cambios han ocurrido. Algunos animales habrán desaparecido y otros habrán cambiado”.

“Entonces podremos determinar el porqué de éstas modificaciones. Si por ejemplo se trata de cambios climáticos que han conllevado al cambio de la población, lo que a su vez indicará si hay un enfriamiento o un calentamiento en la zona”.

Este trabajo no es para friolentos, ya que casi siempre hay que soportar temperaturas muy bajas, tanto a la intemperie como en el agua.

“El principal propósito de esta expedición en la Antártida es monitorear las diferentes especies que habitan en el fondo del océano”, continúa Ivanov. “Así estudiamos su distribución y hábitat”.

Algunas veces los científicos se sumergen para aclarar muchas de sus dudas y observar especies que ya habían sido descritas con anterioridad, pero en otros casos encuentran especies nuevas. Algo que para un científico es un verdadero honor.

“Yo estoy descubriendo nuevos tipos de moluscos cada año”, dice Borís. “Y no soy el único que tiene esta suerte. Hasta hemos encontrado y catalogado especies nunca antes vistas”.

Las deducciones finales serán realizadas un poco más tarde, después de que todas las muestras sean estudiadas y analizadas en el laboratorio. Mientras tanto, los científicos intentarán continuar realizando la mayor cantidad de inmersiones posibles para aprovechar la temporada veraniega, que en esta latitud dura muy poco.