Pepinos españoles responsables de una infección intestinal han dejado ya diez muertos en Alemania y alrededor de mil afectados, 300 de ellos de gravedad. Mientras tanto, en otro país europeo, Austria, se ha iniciado una operación para retirar de la venta al público pepinos, tomates y berenjenas de 33 tiendas que adquirieron productos a dos mayoristas de verduras alemanes, quienes a su vez habían comprado los productos españoles en los que se encontró la bacteria E. coli Enterohemorrágica, productora de la toxina shinga (STEC).
Los mayoristas alemanes avisaron a los comerciantes austriacos e iniciaron una campaña de retirada de productos después de que las autoridades sanitarias de Alemania anunciaran que el brote infeccioso tiene su origen en pepinos procedentes de España comercializados a través del mercado central de Hamburgo.
El Ministerio austríaco de Sanidad ha instado a los consumidores a tirar, y de ninguna manera comer, los pepinos, tomates y berenjenas procedentes de España que adquirieron en las tiendas afectadas. La lista de establecimientos ha sido publicada por la Agencia Austríaca para la Salud y la Seguridad Alimenticia (AGES). A partir de mañana, lunes, esos comercios serán inspeccionados por las autoridades.
Hasta ahora en Austria se han resgistrado tres casos de personas afectadas, y en los tres se trata de ciudadanos alemanes, que han sido internados en hospitales austríacos, si bien uno de ellos se ha recuperado y ha sido dado de alta.
El Centro Europeo de Prevención y Control de las Enfermedades informó que además de Alemania y Austria también se registraron casos en Suecia, Dinamarca, Holanda y Gran Bretaña, aunque estos contagios tuvieron su origen en Alemania.
Madrid está ‘realmente preocupado’
El portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (CECU) de Madrid, Antonio López, recomienda que si alguien "tiene sospechas" de que un pepino pueda estar intoxicado "lo mejor que puede hacer es no consumirlo" y así evitar "cualquier tipo de problema".
López ha reconocido que en la organización están "realmente preocupados" al tratarse de una intoxicación cuyo origen "puede estar en nuestro país".
En este sentido, ha confirmado que aún "no se ha localizado ni identificado el lugar concreto de la intoxicación", por lo que propone "esperar antes de hablar" y "ser un poco prudente" para evitar dañar los productores españoles.