Una investigación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llegó a la conclusión de que los teléfonos u otros aparatos móviles son “posiblemente carcinógenos”. Los expertos de la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC por sus siglas en inglés), integrantes de la OMS, argumentaron que los campos electromagnéticos generados por los ingenios móviles son agentes potencialmente carcinógenos. Esta afirmación “se basa en un riesgo aumentado de glioma, el tipo maligno de cáncer del cerebro”.
El jefe del grupo de los investigadores, Jonathan Samet, añadió que la conclusión de la Agencia se basa en las investigaciones epidemiológicas. Al mismo tiempo dos estudios contribuyeron a la opinión de los expertos. Ellos muestran que el uso del teléfono móvil está asociado con el nivel más alto de glioma, “particularmente entre los que los usan con más intensidad”.
La gente que participó en la investigación usó sus teléfonos por un período entre 10 y 15 años. “Simplemente no sabemos qué puede ocurrir si la gente usa sus móviles por los períodos más largos, posiblemente durante toda la vida”, agregó Samet.
Al mismo tiempo, la Agencia advirtió que su conclusión indica solo una posible relación entre los ingenios móviles y el cáncer. “Hay algunas evidencias del riesgo incrementado de glioma”, comentó el investigador Kurt Straif. “Pero no es algo claramente establecido que el uso de los teléfonos móviles cause de hecho cáncer en el hombre”.
Sin embargo, la IARC indicó algunos pasos que pueden ayudar a reducir los posibles efectos negativos. Informó que el mayor peligro lo representan las llamadas. Si el teléfono se usa para enviar o recibir mensajes de texto o imágenes o si el usuario lo utiliza en la modalidad de ´manos libres´, el grado de riesgo para la salud se reduce significativamente.