El número de afectados por las lluvias que anegaron el estado de Santa Catarina, en el sur de Brasil ya supera el medio millón de personas, según el boletín divulgado por la Defensa Civil. Las inundaciones y los deslizamientos de tierras causados por los aguaceros han afectado de alguna forma a casi 552.000 personas en 61 municipios.
Las riadas obligaron a 30 ciudades a declarar el estado de emergencia y a una a decretar el estado de zona catastrófica. Hay una víctima mortal, un hombre de 66 años que falleció cuando reparaba el tejado de su vivienda en la ciudad de Guabiruba y el edificio se desplomó. Más de 1.600 personas perdieron por completo su vivienda y 20.900 fueron evacuadas a los refugios públicos.
Las lluvias elevaron el nivel habitual del río Itajaí-Açu en casi 12,5 metros, la mayor crecida en los últimos 20 años, afectando principalmente a la ciudad de Blumenau.
El Gobierno regional de Santa Catarina suspendió las clases en todas las escuelas públicas del estado, muchas de las cuales se utilizan como refugios para los damnificados. Algunos municipios están aislados por el bloqueo de varias carreteras principales de la región. Mientras tanto, el Instituto Nacional de Meteorología prevé que las lluvias en la zona continúen.